martes, 19 de mayo de 2009

Ideas para debatir...

Lineamientos básicos de las ciudades actuales

En los últimos años se produjo un proceso de transformación contundente del rol del municipio. Aquel mero ente prestador de servicios e intermediario de trámites ordinarios de su comunidad, ha incorporado funciones sociales, comunitarias y de desarrollo económico local.
Este giro en la funciones del municipio se intenta llevar a cabo conjuntamente con la idea de un gobierno descentralizado, el cual genere la creación de micro municipios, distribuidos en distintos barrios de la ciudad a fin de que éstos se constituyan como un espacio de encuentro entre el vecino y el administrador.
En medio de este viraje en las competencias municipales, se ve indispensable hablar de participación ciudadana, es decir, de una verdadera incorporación del individuo como miembro activo de la sociedad en los quehaceres del gobierno local, el cual no debe presentarse como una institución ajena a los ciudadanos, sino como un espacio de trabajo mancomunado entre éstos últimos y los gobernantes.
En este sentido, es importante formar conciencia participativa, esto es, que el ciudadano tenga verdadero conocimiento de que puede intervenir en la construcción de políticas públicas, planteando una agenda, debatiendo en mesas de diálogo las carencias y potencialidades del municipio, siendo parte de la formación del presupuesto y sobre todo sintiéndose identificado con las diferentes áreas descentralizadas.
Una herramienta esencial a fin de sistematizar las acciones del municipio, definiendo un perfil de ciudad, es el plan estratégico local, en el cual se estipulan: misión y visión; objetivos y metas (es decir fines cualitativos y cuantitativos); agenda anual; formas de rendición de cuentas y estrategias de comunicación a la comunidad de las mismas. Este conjunto ordenado de pasos escalonados daría como resultado la proyección de una política de estado y un perfil de ciudad que embanderaría la localidad.
Son las ciudades las que deben crear sus propios mecanismos y definir su estrategia de desarrollo, permitiéndoles así consolidar su identidad frente a un mundo globalizado.
En este sentido, se podría obtener un óptimo desarrollo, combinando el proceso de fortalecimiento de la escena local y de la participación ciudadana, el papel de las comunidades locales en la construcción de políticas y el desafío de la cooperación internacional en el marco de un escenario global y a su vez diversificado.
Por tanto la ciudad que se mira a si misma como un todo, es decir en la pluralidad de actores, y se vuelve protagonista asumiendo nuevas y desafiantes competencias se convierte en el centro del verdadero cambio.



Por: Lic. María Virginia Coudannes.

2 comentarios:

  1. Maria Virginia, aprovecho para agradecerte tu comentario en mi blog y lo encadeno con este artículo, y creo que para que los espacios existan somos nosotros los que tenemos que agruparnos y empezar a generar cosas.

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  2. Sería un tema para debatir si como sociedad o comunidad tenemos que agruparnos para empoderar nuestros objetivos o si el estado también es una parte interveniente fundamental en los procesos sociales. Existen causas que generan la agrupación de personas en las que el estado no interviene por el derecho mismo de reunirnos o agruparnos, la pregunta es qué pasa si estos modos de agrupación (con diferentes objetivos)se multiplican cada vez más. Permanecer siempre fuera del ámbito del estado es una forma de construir o de generar más ausencia del estado?

    Qué siga el debate!

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